TRASTORNO AUTISTA.
El trastorno autista pertenece al grupo de trastornos generalizados del desarrollo que constituyen una serie de trastornos neurobiológicamente diversos. Son estados caracterizados por déficits masivos en diferentes áreas del funcionamiento, que conducen a un deterioro generalizado del proceso evolutivo. Normalmente, estos individuos, que están incapacitados por formas múltiples, muestran un proceso evolutivo que no es meramente lento o limitado, sino atípico o desviado.
El trastorno Autista comienza en la etapa de la infancia y supone incapacidades importantes en prácticamente todas las áreas psicológicas y conductuales. El Síndrome se hace evidente durante los primeros 30 meses de vida y da lugar a diferentes grados de alteración del lenguaje y la comunicación, de las competencias sociales y de la imaginación.
Posibles Causas.
- Genéticas: Existe base genética asociada a trastornos Cromosomaticos, siendo frecuente el síndrome X frágil.
- Biológicas: Estudios de Neuro – Imágenes muestran diferencias en algunas estructuras del cerebro, como en los ganglios Basales, lóbulos temporales, etc. En autopsias se ha comprobado un menor desarrollo del sistema límbico (relacionado con la parte social).
- Otras: Se investiga por que se presentan con más frecuencias casos de autismo en familias con individuos afectados por el síndrome, o con enfermedades de tipo esquizofrénico y trastornos bipolar. Se explora la posible conexión de este síndrome con un virus como la rubéola o el herpes, o con causa ambientales.
Principales Características.
- De bebes alejarse del cuidador, evitar contacto físico.
- Excesivamente agitados o pasivos.
- Mecerse o golpearse.
- Alcanzan puntos clave del desarrollo (hablar, Caminar, etc.) antes que niños promedio o suelen retrasarse más.
- Desarrollo normal hasta alrededor de los 18 meses a los 3 años de edad.
- Aparición de conductas autoestimulantes, autolesionarse, problemas para dormir o comer, contacto ocular pobre, insensibilidad al dolor, hiperactividad, trastornos de atención.
- Insistencia en rutinas.
- Aproximadamente el 20% tiene ataques de epilepsia durante la pubertad por primera vez.
Nota:
La aparición de uno o de varios de estos rasgos no es determinante para concluir con un diagnóstico de Autismo. El diagnóstico debe ser hecho por un profesional del ámbito clínico para que puedan considerarse, además de la presencia de muchos de estos rasgos, otros elementos que dan cuenta en profundidad de la problemática amplia del autismo.