Me llamo Ligia, y soy Mamá de Ligia Herrera; y quiero compartirles una pequeña parte de la historia de mi vida. No resulta fácil narrar en esta líneas el recuerdo de ese momento que cambio mi vida de un modo radical y para el resto de mi vida; después el primer instante supe que yo nunca mas volvería a dar un paso y valerme por mi misma, en mi mente iban y venían miles de pensamientos; pero ahora después de tantos años me doy cuenta que Dios no le pone a alguien una cruz que no pueda cargar, que siempre hay una luz al final del túnel, y que siempre hay algo más que superar de la vida; que una adversidad se puede convertir en una bendición, pero para llegar a esta aceptación de mi realidad tuve que por noches y días enteros de lagrimas, dolor,tristezas,deseos de no vivir; ahora me doy cuenta que eso es el proceso de la “Aceptación” , luego que alguien me hizo ver que yo valía igual en la silla de ruedas o caminando, también había algo que me decía que tenía que salir adelante, ese alguien era mi hija, pues en ese entonces iniciaba su proceso de adolescencia más que adolescente “una niña” y me dolía mas ella que mi pequeño hijo de apenas 5 años, pues ella me necesitaba más yo sabía que mi hijo iba a tener todo, yo sabía que mi hermana velaría por él; pero mi hija? Entonces tuve que sacar fuerzas hasta de donde no tenia y hubieron bueno personas que me hacían sentir bien y otras que se empeñaban hacerme sentir mal; ahora comprendo que no era maldad de ellas simplemente hay muchas personas así y eso no lo puedo cambiar.
Todo cambio radicalmente de ser una mujer libre, pasé a ser alguien que ahora depende de una silla de ruedas y de otras personas y fue mi hija la que tuvo que tener esa responsabilidad. Poco a poco, pasó a paso las cosas fueron acomodándose, tenía que incorporarme a mi trabajo y eso también fue difícil pero una vez más acosta de mi propio dolor me presente a una escuela nueva, al principio la directora dudo de mi capacidad pero me recibió y me dio la asignatura de Estética materia que nunca había dado, no era mi especialidad pero ni modo había que aceptarlo y bueno mis amigas me daban ideas y al final del año hice una exposición, así también me incorpore al trabajo que tenía en una escuela nocturna y también el director no me recibió con alegría, pero le demostré que esa silla no tenía nada que ver en mi capacidad mental y he demostrado que la vida tiene muchas sorpresas y que uno debe estar preparado para enfrentar esas adversidades, me he destacado en mi profesión la que disfruto, mí trabajo lo hago con amor los niños y niñas me dan enseñanzas, soy una mujer plena obviamente cosas que antes tal vez me daban placer, alegría ahora han pasado a no ser prioridades en mi vida para mi esta silla es una bendición tengo años de no derramar una lagrima por eso, soy feliz con la familia que tengo, las personas que me rodean y otras cosas que Dios me ha dado, no hay barreras todo está en la mente, todo se soluciona afirmo y confirmo que soy feliz y si alguien en este momento atraviesa una situación igual, yo te digo no te desanimes agárrate fuerte de las manos de Dios y no te sueltes que el hará el resto.
He olvidado muchos detalles, pero para contar la historia completa tengo que hacer un libro.
Te felisito.
Eres una gran mujer !!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
En mi pais te dirian que eres muy Berraca !!!
Dios te Bendiga por ser fuerte en lo que uno ve impossible.
Ricardo
Gracias Ricardo por compartir tu comentario.
que guerrera es usted ahi podemos ver que Dios nunca nos desampara siempre esta ahi uno no ve las bendiciones que El nos da pero el siempre estara pendiente de nosotros para Dios no hay nada imposible !!
Alexander
El ser humano es capaz de salir adelante, lo que muchas veces nos afecta, son los comentarios negativos, que nos hacen retroceder. Pero aca vemos un ejemplo que una mujer nunca sera ni mas ni menos q el hombre. Igual sabe salir adelante apesar de todos los obstaculos q se le presente. Ese famoso dicho que la mujer solo es para los oficios de la casa son pensamientos de la edad de piedra. Adelante!!!!!!! A demostrar q las mujeres son mejores que los hombres.
Siempre la he admirado mucho niña Ligia!! Gracias por compartir su historia. Es usted una mujer “cachimbona” y sobre todo feliz. La quiero mucho